Existe la opinión de que los niños a menudo se enferman, sin embargo, desafortunadamente, a veces estas enfermedades son mucho más complicadas que el frío banal e incluso la gripe. Una de estas enfermedades es duodenitis. Desafortunadamente, esta dolencia realmente puede manifestarse incluso en niños. Además, surge independientemente de la edad.
Al igual que un adulto, la duodenitis en un niño puede ser aguda y crónica. Las razones por las cuales la enfermedad aparece en los niños son abundantes. Entre ellos se encuentran las características de genocódigo, algunos medicamentos, alergias, virus, bacterias, parásitos, inmunidad débil, etc.
Los principales síntomas de duodenitis en niños
Durante la fase aguda de duodenitis, los niños comienzan a quejarse de dolor en la parte superior del abdomen a la derecha o en el centro. En la mayoría de los casos, el dolor es paroxístico. Además, estos dolores aparecen con el estómago vacío por la noche o después de 60-120 minutos. Al final de la comida. También puede observar los trastornos del sistema digestivo del niño, expresados por capricho, náuseas y pesadez en el abdomen. También es posible la debilidad, los latidos cardíacos rápidos, el aumento de la sudoración y la somnolencia. En la mayoría de los casos, estos síntomas se manifiestan no más de 2 semanas. La duodenitis pediátrica en la mayoría de los casos acompaña a la colecistitis o gastritis. Con la ausencia prolongada de tratamiento, la gastroduodenitis también puede ocurrir.
El diagnóstico de duodenitis en un procedimiento simple con un gastroenterólogo es absolutamente imposible. En este sentido, en el caso de la presencia de síntomas de esta dolencia, se recomienda someterse a exámenes especiales, que incluyen radiografías intestinales y análisis. Además, es extremadamente importante determinar si los niños tienen enfermedades concomitantes del páncreas, el hígado y otros órganos cercanos.
Tratamiento de duodenitis en niños
En primer lugar, llamamos la atención de los padres sobre el hecho de que el tratamiento de duodenitis en niños requiere un enfoque integral. Esto significa que, en primer lugar, debe enseñarle a su hijo a llevar un estilo de vida saludable. Un requisito previo para la recuperación es cumplir con la dieta, tomar vitaminas, analgésicos, medicamentos especializados y reposo en cama. A menudo para normalizar el trabajo del intestino, a los niños se les prescribe un medicamento como Metoclopramida. A su vez, con duodenitis erosiva, el tratamiento se realiza con la ayuda de Gastrofarm y Oxiferricorbon. Se sabe que estos medicamentos tienen un efecto restaurador en la mucosa intestinal. Los sedantes y el uso de tranquilizantes ligeros desempeñan un papel importante, como Seduxen y Elenium.
La dieta en niños con duodenitis, como regla general, está dirigida a reducir las manifestaciones de los síntomas e implica deshacerse de los factores que irritan la membrana mucosa. Esto es comida salada, grasosa y aguda. Además, todos los alimentos que se le dan al niño deben ser cuidadosamente molidos. Esto se debe al hecho de que los alimentos grandes pueden dañar el caparazón ya inflamado del intestino.
Además, un especialista puede recetar para la fisioterapia infantil, así como fisioterapia. Si es posible, el niño debe ser enviado a un sanatorio o un spa. En la mayoría de los casos, con el tratamiento de sanatorio, esta enfermedad desaparece mucho más rápidamente en un niño y se mejora el estado general de la enfermedad.
En la mayoría de los casos, la duodenitis infantil es fácil de tratar y no presenta complicaciones. En este caso, es muy importante hacer un diagnóstico a tiempo. Es decir, si el niño se queja de dolor abdominal persistente u otros síntomas, debe guiarlo a una consulta con un gastroenterólogo, ¡porque la curación es mucho más fácil que una úlcera péptica!