La abdominización pancreática es un procedimiento quirúrgico. Durante dicha manipulación, el páncreas se excreta en el espacio abdominal. Se realiza un procedimiento con el objetivo de detener los síntomas del dolor, preservando el funcionamiento natural del órgano enfermo. También una indicación para la intervención es la prevención de tales complicaciones comunes de la pancreatitis, como fístulas, elementos pioinflamatorios, pseudoquistes. Además, la abdominización ayuda a limpiar el cuerpo de toxinas que están inflamadas, el páncreas enfermo por sí solo no puede inferir. Como regla general, se recomienda la cirugía para pancreonecrosis y pancreatitis aguda.
Antes de la ablación, el paciente debe prepararse preliminarmente. Durante el cual, el médico, antes que nada, estudia en detalle el historial médico del paciente, designa una serie de estudios médicos.
Técnicamente, el proceso de llevar a cabo la abducción se puede dividir en tales etapas:
- se introduce anestesia general;
- La pared abdominal se diseca;
- Se diseca un ligamento gastrointestinal. También en este momento el médico examina el páncreas;
- pancreático;
- El tubo de drenaje es fijo;
- tejido abdominal cosido.
La intervención quirúrgica debe ser realizada necesariamente por un gastroenterólogo calificado. Al igual que cualquier otra intervención, la abdominización tiene una serie de contraindicaciones. Son los siguientes:
- Niveles elevados de enzimas en la sangre;
- Hay problemas con la liberación de orina;
- La orina tiene un alto contenido de glucosa;
- No es posible recuperar el volumen de sangre perdida durante la cirugía;
- Factores individuales.
Después de la abdominopresión del páncreas, se acerca un período de recuperación. Su esencia es la siguiente. Antes de que el médico realice la costura de las paredes, se fija un globo de látex al exterior sobre el páncreas. En promedio, dentro de una semana, este dispositivo se usa para enfriar el órgano transportado. Tan pronto como la condición del paciente se estabilice, se retira el balón.
La mayoría de los gastroenterólogos creen que una operación de este tipo permite estabilizar los procesos vitales del órgano y permite detener el funcionamiento de la enzima.